Cocina:
Inglesa
Dificultad:
Fácil
Tiempo:
1 hora
Hoy os traemos el que probablemente sea el plato británico que más lejos ha llegado. Ya se preparaba en las casas británicas en el siglo XVIII, por lo que es un plato muy tradicional y que todavía se suele comer los domingos en familia. Se trata de una carne asada, condimentada y servida templada o fría en lonchas y que poco a poco ha ido ganando adeptos a lo largo del mundo por la facilidad de cocinado e intenso sabor para los #Fansdelvacuno.
Una de las características fundamentales debido a la poca elaboración que requiere, es que para que quede un buen roast beef, es necesario que se realice con una carne de vacuno de buena calidad, como la carne nacional, la nuestra, que es una de las mejores del mundo. Al ser un asado, necesitamos que tenga una veta intramuscular de grasa, con ello conseguiremos una roast beef muy tierno. Tradicionalmente el roast beef se realiza con cortes como el lomo (alto o bajo), el redondo, o el que utilizaremos en este caso, el solomillo o si el bolsillo aprieta, algo más económica es la espaldilla.
Ingredientes para 4-6 comensales:
1 kilo de solomillo o espaldilla de ternera.
Hiervas provenzales.
Mielmostaza
Pimienta negra recién molida.
Sal al gusto.
Aceite de Oliva Virgen Extra.
Preparación
1º Primero atamos unas cuerdas alrededor del solomillo, para así evitar que se deshaga y para que nos salgan unas lonchas perfectas. Salpimentamos al gusto.
2º Ponemos una sartén con un chorrito de aceite, y cuando el aceite esté caliente añadimos el solomillo y doramos un poco hasta sellarlo.
3º Una vez esté la pieza completamente sellada, lo mezclamos con la salsa mielmostaza y las hiervas provenzales. Impregnamos toda la carne con la salsa y lo metemos al horno a 170º, el tiempo variará dependiendo de lo grande que sea el solomillo, en este caso 30 – 40 minutos.
4º Una vez este hecho, lo sacamos y a la hora de emplatar lo partimos en rodajas finas. Y ya lo tenemos listo para degustar.
Puede acompañarse con verduras, puré o patata asada. Recomendamos servirlo templado o frío tras dejarlo reposar alrededor de 20 minutos así lo podremos cortar con facilidad e incorporarlo sobre una tosta con la salsa que más nos guste. ¡Qué delicia!