Estamos concienciados y te vamos a ayudar a reducir el desperdicio de los alimentos. Las consecuencias son importantes no solo desde el punto de vista económico, sino también desde una perspectiva ambiental y ética. Al reducir el desperdicio de carne, no solo ahorras dinero, sino que también contribuyes a una gestión más sostenible de los recursos alimentarios y al cuidado del medio ambiente.
Según datos del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU, este desperdicio es el responsable del 10% de las emisiones mundiales de efecto invernadero. Por esto,recomendamos una serie de pequeñas acciones que podemos llevar a cabo para luchar contra esta situación. Y que, cada uno de nosotros, podamos ayudar a paliar este problema tan poco visibilizado en la actualidad.
01.
Seguimiento periódico de la salud de los animales para detectar enfermedades. Aplican vacunas específicas para prevenir enfermedades comunes, que ayudan a estimular el sistema inmunológico y realizan tratamientos regulares para eliminar y prevenir la presencia de parásitos.
02.
Aprovecha los alimentos sobrantes para otras comidas. Experimenta y prueba toques innovadores a otras recetas con las que creas que pueden combinar bien. La máxima es: “Aquí no se tira nada”.
03.
Haz una lista de la compra con los productos necesarios, y, si hace falta, haz hueco entre semana para ir varios días a hacer la compra siguiendo este mantra: “sólo productos NECESARIOS”.
04.
Coloca los alimentos con menor caducidad delante de los de mayor en tu nevera para ir utilizándolos antes, y evita así correr el riesgo de que se pasen de fecha.
05.
Diferencia entre la fecha de caducidad, a partir de la cual no se puede ingerir el alimento, y la de consumo preferente, que es el tiempo aproximado hasta que el producto conserva sus cualidades optimas.
06.
Organiza los productos secos en envases de cristal con tapa, para que se conserven mejor y puedas controlar las cantidades exactas que van quedando de cada uno.
Otros tips importantes para evitar el desperdicio.
Y como es habitual, te aportamos también algunas ideas que te van ayudar a no tirar el más mínimo alimento.
- Evita comprar por impulso o atraído por ofertas grandes cantidades de carne. Mejor, concéntrate en adquirir la que realmente vayas a cocinar esa semana, para así evitar el desperdicio del que estamos hablando. Ahorra dinero y cuida de paso el medioambiente.
- Almacénala adecuadamente. Sitúa la carne cruda en el estante inferior de tu nevera, puesto que es el lugar que normalmente mantiene la temperatura más baja.
- Congela si es necesario. Si sabes que no vas a utilizarla en un corto periodo de tiempo, asegúrate de envolverla correctamente y de no volver a congelarla una vez la hayas descongelado.
- Comprueba que está bien cocinada, para que el sobrante pueda ser almacenado y seguro para volver a ingerir.
- Sé creativo. Como te decíamos antes, explora nuevas recetan que den aprovechamiento a esa carne de vacuno que no sabes que hacer con ella en un primer momento. Aquí te dejamos a modo de ejemplo un post con recetas rápidas y fáciles que te pueden ser útiles. O siempre puedes echar mano de los clásicos para sacar partido a esa carne: croquetas, empanadillas, tacos, albóndigas… que le darán una segunda vida a tus platos de vacuno.
Seguro que con estos consejos y con otros hábitos que ya practiques, además de los que puedas ir aprendiendo, te ayudarán a reducir tu desperdicio. Te harás un favor a ti… y a todos nosotros. Gracias.
